mayo 01, 2013

La Reina Máxima (Sucesión en una Pyme)


Image courtesy of Podpad / FreeDigitalPhotos.net
Desde su fundación por un emprendedor de esos que dejan su cuerpo en la patriada, cierta Pyme coronó a la Creatividad como reina.

Llevándola de bandera en cada decisión estratégica, encabezando cada batalla táctica e incluso en cada movimiento operativo, la creatividad tomaba el centro de la escena y todos estaban a sus pies.
Los empleados-plebeyos, convencidos de la naturalidad y poderío de su reinado, la invocaban a cada paso y desplegaban en su nombre las más osadas iniciativas.

La Pyme lentamente fue creciendo, y con gran goce de salud, robustecida, reconocida en el mercado, su fundador creyó que era el momento de dar un paso al costado luego de tanto trabajo y anunció su abdicación.
Con el alejamiento de su fundador, esta Pyme vería varias cosas modificarse en su camino…



La convocatoria se hizo como marca el protocolo, todo fue medido y premeditado, los preparatorios comenzaron con mucha anticipación y todo el mundo estaba al tanto de lo que iba a suceder.
Como si fuera una de esos lanzamientos que se hacen con un gran evento, los convocados fueron ocupando su sitio en la escena.
Extrañamente, y en sentido contrario a lo que hasta ese momento había pregonado el fundador, las ubicaciones de privilegio fueron ocupadas por inversores, accionistas y tenedores de bonos. Los empleados-plebeyos ocuparon las posiciones más rezagadas, y su voz se hizo rumor distante ante la palabra firme del otro grupo.

Los inversores y demás cumplieron con el protocolo de etiqueta, y desfilaron previamente sobre la alfombra roja, sucumbiendo ante el néctar de los flashes. Sus sonrisas auguraban una gran perspectiva futura, a la altura de sus expectativas.
Los empleados-plebeyos ingresaron por una puerta del costado, con ropas sencillas, las mismas que solía usar el fundador y ahora eran miradas con recelo y desconfianza por los organizadores.

Las máximas autoridades de la zona de influencia de la Pyme estaban invitadas.
Intendente, concejales, secretarios y jefes de comités decoraban la escena. Habían tenido un contacto distante con el fundador, a pesar de lo mucho que la empresa había contribuido al desarrollo de la región, brindando empleo directo e indirecto, auspiciando de integradora con otras industrias y regiones, estando siempre cerca de su comunidad con acciones concretas de impacto ciudadano.
Sin embargo, ellos veían en este cambio nuevas oportunidades, posibilidades de un tipo distinto de intercambio y crecimiento, más cerca de lo acostumbrado con alguna de las otras empresas de la zona, especialmente las radicadas en el último período.

Luego de un breve llamado a silencio por parte de los sucesores, y sin alusiones al reinado anterior de la Creatividad, un riguroso plan financiero fue presentado y como corolario, en medio de luces y aplausos, la Utilidad fue proclamada como la Reina Máxima (1).

Los viejos empleados miraron el cuadro del fundador con lágrimas en los ojos y se alejaron en silencio.

(1) Nada que ver con lo que usted está pensando.

2 comentarios:

  1. Juan Carlos Pugliesejueves, mayo 02, 2013

    Quien no tiene el don de la creatividad se termina aferrando a cosas tan simples como al concepto de la utilidad/rentabilidad....

    Como objetivo final tantos unos como otros, persiguen los mismos objetivos, pero que distintas sensaciones se viven en el dia a dia.

    Por eso esta bueno que cuando alguien proponga ideas creativas que salgan del corazón, no te respondan con el bolsillo...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Respetadísimo Juan Carlos,
      Lo hacía tomando unos cafecitos con Don Arturo allá arriba, nunca pensé que se iba a molestar comentando en este humilde blog.
      Un creativo a la derecha...

      Eliminar

Prefiero los comentarios firmados con pseudónimos a los anónimos. Gracias.